Emilio escribió un post lleno de verdades: a veces pareciera que estamos cerca del ocaso blogueril. Blogs nacen, se tornan *aburridos*, se llenan de redundantes anécdotas, se vacían, se espacian, el autor /a se enamora y lo abandona, se da en la madre y regresa buscando consuelo, termina cansándose de él, ha pasado la euforia del inicio, requiescat in pace.
Lo mismo sucede con los lectores, seguramente se hartan de leer, no tiene tiempo de, esperan reciprocidad, descubren con el paso del tiempo que en realidad odian al bloguero que leen y que si lo conociesen le escupirían el rostro por obtuso...¿no les ha pasado eso?, primero AMO tus letras-luego ¿te hicieron una lobotomía?. Ó un “me encanta cómo habla este güey de la melancolía...(tres meses después)...chale, alguien llévele prozac”.
Desde que abrí la maraña la lista del blog roll fue creciendo y no borré a ninguno. Admito que no soy muy cuidadosa y no lo he actualizado desde hace meses, y el criterio para agregar blogs fue cambiando con el tiempo, empezó con los blogs que solía leer hace años (españoles), luego empecé a añadir a mis amigos, blogueros que me comentaban y yo a ellos (justo como lo describe Emilio), luego a los que fuí conociendo en reuniones blogueriles, y luego se me olvidó. Ya no sé cómo re-organizar mi blogroll. También he pensado en que ya chole con el diseño de este espacio "¿es diseñadora y tiene un template tan austero?", sí, lo sé, soy una huevona. Espero que en las próximas semanas pueda cambiarle la fachada y organizar-renovar mis links.
Lo mismo sucede con los lectores, seguramente se hartan de leer, no tiene tiempo de, esperan reciprocidad, descubren con el paso del tiempo que en realidad odian al bloguero que leen y que si lo conociesen le escupirían el rostro por obtuso...¿no les ha pasado eso?, primero AMO tus letras-luego ¿te hicieron una lobotomía?. Ó un “me encanta cómo habla este güey de la melancolía...(tres meses después)...chale, alguien llévele prozac”.
Desde que abrí la maraña la lista del blog roll fue creciendo y no borré a ninguno. Admito que no soy muy cuidadosa y no lo he actualizado desde hace meses, y el criterio para agregar blogs fue cambiando con el tiempo, empezó con los blogs que solía leer hace años (españoles), luego empecé a añadir a mis amigos, blogueros que me comentaban y yo a ellos (justo como lo describe Emilio), luego a los que fuí conociendo en reuniones blogueriles, y luego se me olvidó. Ya no sé cómo re-organizar mi blogroll. También he pensado en que ya chole con el diseño de este espacio "¿es diseñadora y tiene un template tan austero?", sí, lo sé, soy una huevona. Espero que en las próximas semanas pueda cambiarle la fachada y organizar-renovar mis links.
Sé que mi estado de ánimo de los últimos meses ha sido depresivo y hartante. Yo misma me he hartado de mí. Esto obedece a una inquietud que traigo en la cabeza desde hace algún tiempo, pues me dí cuenta que algunos que tenía linkeados me han borrado de sus listas. Ni hablar, uno no es monedita de oro.