domingo, 7 de septiembre de 2008

Mexicanos al grito de paz

El sábado 30 de agosto asistí a la marcha. Pero para qué, *si no sirve de nada, no vale la pena, no solucionará la situación de forma tajante, la provocó la muerte de un rico, sólo es de fresas, es una marcha panista... bla, bla, bla*.

Antes que nada yo no creo en ninguna de las razones anteriores. Hace cuatro años, me fue imposible asistir, y recuerdo que muchos argumentaron lo anterior, ésta vez quise comprobarlo con mis propios ojos.

No creo que sea una manipulación mediática con el fin de una cortina de humo para la reforma energética (después explicaré el porqué pienso esto). Ya desde hace DOS AÑOS no pasa un mes sin que me entere de asaltos, robos, secuestros, extorsiones teléfonicas, que han sufrido compañeros de trabajo, amigos, familiares, yo incluída. Tan sólo en el mes pasado se robaron a punta de pistola una camioneta de la casa de al lado (no era la casa de la mata-jacarandas, chale), supe de dos secuestros (uno express, por desgracia el otro sigue en curso). No, ninguna de las víctimas son millonarios ni empresarios ni políticos. Es por eso que la marcha tuvo tal concucurrencia, por que el caso Martí es la gota que derramó el pinche vaso del hartazgo. Y si sólo la muerte de un rico hace tal eco, considero que podría aprovecharse tal situación para atraer atención mediática o gubernamental. Sí, sería más auténtico si todo esto surgiera por la muerte de un Juan Hernández, pero no le pidamos peras al olmo.
Me pareció interesante que alguien llevara puesta tal camiseta

Me enteré de la movilización por el facebook y sin saber de quien era la iniciativa decidí asistir, por el simple hecho de que estoy hasta la madre. Después hubo otra convocatoria, los ánimos se aumentaron y se fijó una única fecha. Empecé a dudar cuando leí que una *célebre actriz* (a la que vería al finalizar la macha de mano de su achichincle y otros lacayos pronunciando sus muletilla favoritas: *manito* y *mijo*) suspendería una función de la obra de teatro que produce para asistir, escuché (es que existe la mala costumbre en casa de tener la tele prendida en las mañanas aún después de las noticias, como para que haya ruido, pues) a los conductores de asquerosos e insultantes programas matutinos apuntarse al evento e invitar a sus pobres espectadores...pero me dije *no está mal, finalmente entre más gente mejor, y es algo que afecta a TODOS*, no tendría porque molestarme en estar en el mismo lugar que ellos si exigimos lo mismo, si nos afecta igual.

Al día de hoy me resulta triste saber que muchos consideran una pendejada asistir a una marcha, que las califiquen con colores partidistas y que se mofen de los reclamos ahí expuestos. La mayoría de dichos detractores vivieron eso hace dos años cuando marcharon en las asambleas de AMLO. ¿No es irónico que ahora se burlen de esas manifestaciones?,
¿o será que sólo a los panistas los asaltan/secuestran?... la idea de que únicamente a un estrato social le pegara el hampa sería benéfica (mientras no nos tocara a nosotros estar en ésa posición) pero irreal. No hay ni para dónde hacerse.

Llegamos al metro Hidalgo a las seis en punto y ya desde ahí se veía Reforma lleno y Av. Juárez también. Caminamos a la Glorieta de Colón (tan albureable apellido, ¡caray!) y como amenazaba una probable llovizna decidimos incorporarnos a partir de ahí. Vi de todo. TODO. Gente bien fresa, estudiantes, viejitos, niños, familias, parejas, gente muy humilde, unos rastafaris, indígenas, güeyes con cara de jefes de oficina, gente triste, gente enojada, gente sonriente . Yo no podría categorizar la marcha en mayorías, vi a representantes de toda la jungla defeña, toda ella, y ya sé que lo estoy recalcando demasiado, caminando lado a lado, codo a codo (esto me recordó al recientemente fallecido Gilberto Rincón Gallardo...él usó un verso de Benedetti en uno de sus discursos durante su campaña presidencial del 2000: “y en la calle codo a codo, Somos mucho más que dos” ) . Vi enojo. Vi miradas de comprensión y entendimiento como son las miradas entre los que se saben enfermos de la misma dolencia. Conforme nos íbamos acercando a Eje Central, empezaban a escucharse tímidos aplausos y gritos de *México, México*. Se suponía que era una protesta silenciosa, pero encuentro difícil que un mexicano pueda llevar a cabo tal tarea, y más aún, cuando siente que tiene mucho que reclamar.
Yo concuerdo, que se vayan todos, toditos.
Yo iba cuasi como espectadora curiosa y empecé a contagiarme (se llama euforia colectiva, ya lo sé) con el enérgico enojo y descontento que me rodeaba, dejé de pensar en todos los contras de la marcha (lo que acoté al principio del post). Al llegar a Madero empecé a gritar y es más, a promover, el que creo debió ser, el *eslogan* de la movilización: “Si no pueden, que renuncien, renuncien, renuncien”. Fue catártico (quedé ronca).
Me emocioné con estas dos GRANDES ideas
Ya en el Zócalo los gritos y consignas se espaciaban, como quien carga baterías para el momento cumbre. Sin embargo, me tocó escuchar unos “Fuera Marcelo, fuera Marcelo” -¿no que no era partidista cabrones?-, afortunadamente eran pocos los que lo coreaban y sólo fue en un par de ocasiones (también hubo contra Calderón). Con todo y que este tipo no es de mi agrado (cómo ya ningún político lo es), está lejos de ser el único responsable de la inseguridad en la ciudad/país, se me hizo una estupidez fuera de lugar salir con grititos así. En mi opinión somos todos culpables. La clase política por carcomida, podrida, y corrupta. La sociedad civil por dejada y apática.
A este señor lo vi con el brazo en alto sosteniendo el S.O.S. desde Metro Hidalgo

Nunca había cantado el himno en el Zócalo. Nunca lo había escuchado con tantos ánimos y enjundia. Nunca lo había escuchado en tantas voces. Me inundó el sentimiento patriótico (quiero pensar que no patriotero), creía que tal fervor sólo lo provocaba la decepción -es decir- la selección nacional en el mundial de futbol, qué maravilla saber que no siempre es así, qué tristeza el motivo.
¿He dicho que no puedo usar mi cámara?, estúpidamente hace unos meses perdí el cargador de la batería en un taxi, el chiste cuesta 1000 pesos (¿por un cargador de batería?, estúpida sony), tomé muchas fotos, pero con las cámaras de mis amigos, éstas son algunas que me han mandado por mail. Aunque borrosa y mal enfocada, esta foto me recordará al Zócalo de ésa tarde.

Le faltó cabeza (líderes, pues,) a la marcha. Le faltó alguien que aterrizara de manera concreta el reclamo de la multitud. Y no me refiero a los que la convocaron (que según esto no son de ningún partido y bla bla, pero uno nunca sabe para quien trabajan), o algún artistilla televizco ó el propio Alejandro Martí. No sé quien hubiera sido idóneo para dicha tarea, sólo sé que eso fue lo que le faltó, no encuentro lógico venir a enterarme de las peticiones vía periódicos y medios electrónicos y no de viva voz en la mismísima protesta.

Vi carteles muy tristes, donde había reclamos añejos y retratos de ausentes. Un escalofrío recorre mi espalda, soy incapaz de percibirme como alguien que saldría adelante después de una tragedia similar.


Lentamente fuimos abandonando el Zócalo, para nuestra sorpresa, por todas las calles que desenbocaban a la plancha seguían llegando contingentes, dicho de otro modo, la plancha se vació y se volvió a llenar.

Es una pena que todo el cirquete que armaron nuestras amadísimas televisoras dejen en muchos un mal sabor de boca, desconfianza, y mofa. Cuando debería ser motivo de gozo el que algunos mexicanos logren salir de la apatía, que no sean acarreados, y que están dispuestos a seguir con otras medidas para obligar al Estado (cosa que idealmente no debería pasar) a hacer bien su principal tarea: garantizar la seguridad a sus habitantes mediante el cumplimiento de las leyes. En repetidas ocasiones he dicho que me parece injusto que se culpe a la pobreza de los delitos, cuando sólo es un factor. ¿Por qué hay ladrones, secuestradores, asesinos?. La respuesta la dejaron Ramón Mier:

“Pregunta:
¿Porqué se lame el pene un perro?

Respuesta:
Porque puede.

Algo parecido sucede con la delincuencia. El delincuente roba, asalta, extorsiona, secuestra y asesina porque puede. Porque sabe que lo más probable es que su crimen quede impune.”

y Chilangelina:

“La razón no es la falta de solidaridad social, la razón desde mi punto de vista es una sola: IMPUNIDAD.
Tienes razón, los que roban no lo hacen por hambre; lo hacen porque la persona a la que le roban no hace la denuncia (te apuesto lo que quieras a que tu amigo no la hizo); porque cuando la gente hace la denuncia difícilmente los detienen, y porque cuando los detienen, acaban saliendo libres (entre otras cosas, porque no hay otras denuncias con las cuales puedan sumar delitos y sentenciarlos). En México se castigan solo TRES DE CADA CIEN delitos.”


Ambos fueron comentarios del post en el que relaté los asaltos que sufrieron dos amigos míos, donde me enteré de más bajezas y ojeteces de la mafia. Donde empecé a dilucidar lo hartos que estamos todos por que no hay sanciones, por que no hay denuncias, por que no existe siquiera una probabilidad medianita de que les atraen, les castiguen ejemplarmente, mucho menos de que les readapten.

Ladrones hay, pero hace dos décadas no eran con la violencia de hace siete años a la actualidad, oír de un asesinato era inconcebible (exceptuando los *pasionales*). ¿Alguien recuerda la horrible anécdota del estudiante de 17 años asesinado por quitarle su celular?, ¿quién organizo una marcha por él?, nadie, ni tú ni yo. ¿Por qué? por falta de convicción y difusión, algo que el caso Martí sí tuvo, por tratarse del hijo de un empresario. Es muy injusto que sólo así se exija justicia, pero es un asunto en el que todos tenemos la culpa pues nadie organiza movimientos y protestas por esas víctimas anónimas, aquel al que le parezca ingenuo reclamar por secuestros, asaltos, violaciones asesinatos, quédese tranquilo en casa. No salga a las calles. Nunca.

Ojalá no sea de nuevo llamarada de petate...

21 comentarios:

Fer V dijo...

Las marchas de este tipo no son inutiles, si funcionan, aunque deben ser repetidas, enérgicas, siempre pacíficas y, dentro de lo posible, completamente enfocadas al fin que persiguien (deberían ser apartidistas, incluir a todos los estratos económicos y sociales y no aprovecharse para otros fines).

Los resultados son lentos, en la mayoría de los casos, pero los hay y podemos citar a Walesa y a Mandela como algunos que optaron por la protesta pacífica y prevalecieron. Que quizá es lo que le hace falta al nuestro movimiento por la paz: un líder quien nos guie y represente a todos (tal como lo mencionas, alguien quien tome la palabra).

Me parece excelente que no hayas caido en el eterno juego de "pa'qué, si no sirven; pa´qué si son partidistas (o clasistas)...", ojalá más gente pensara como tú. Y esperamos todos que la situación empiece a mejorar ¡pronto!



¡Sonrie!

Alletta dijo...

defe yo realmente creo que las marchas no sirven para nada, pero ninguna de ellas, no importa de que color la pintes.
Por qué lo creo? porque muchísima de la gente que asistió a la marcha ya se quedó conforme con asistir y exigir seguridad cuando es un asunto que debemos resolver entre todos.
Si OK las autoridades (de todos colores) deben hacer su chamba, pero nosotros como sociedad también, denunciar delitos, no dar mordidas, respetar las leyes, no se trata únicamente de xigir sin trabajar.
Yo no asistí ala marcha porque me pareció tonto ir a apoyar unas propuestas que no conocía, se me hizo ilógico que las propuestas se presentaran hasta un día después, como avalarlas sin conocerlas? comoe star segura que no me iban a usar como borrego de su causa en el caso de que si fueran partidistas?
Y repito me preocupan los miles que se sienten que "ya cumplieron" con haber ido a la marcha, en realidad el trabajo apenas comienza.

El Agus dijo...

Yo los convidaría a responder una pregunta bien sencillita:

¿Qué estamos haciendo mal como sociedad que estamos generando individuos que le dan tan poco valor a la vida humana?

Todos estamos de acuerdo en que se deben endurecer las penas para los secuestradores y que debe desaparecer la impunidad, pero eso es atacar las consecuencias. Más bien debemos pensar en las causas.

Saludos

Kix dijo...

Mi querida Defeña, se trató ampliamente el tema en mi bló en las semanas pasadas, pero por una cuestión que le hice, perdí todos mis comments. Sin embargo, sí había muchas voces en contra de manifestarse, incluso conozco personas que incluso se burlan de esas personas que pedimos una solución. Yo concuerdo con lo que dices tú.

Al ver las fotos que pones no pude evitar deprimirme, qué dolor tan grande :-(

Emilio dijo...

'Que reununcien'. 'que se vayan'. Vale.
Pero ¿quién va a tomar su lugar? No un ciudadano sino otro político; la persona que canalizara todo ese descontento que la marcha provocó estaría haciendo política; hacer la denuncia de la política y de la clase política también es hacer política.
saludos

La niña Fonema dijo...

Creo que tu post es la voz de las mayorías. Todas las opiniones que he escuchado van en el mismo sentido. Lo curioso es que dentro de el cuerpo de tu argumentación existan marcas tan claras del problema preciso (la que recuerdo por ahora: sin saber de quién era la iniciativa...). Me parece que estás dejando cabos sueltos y no estás observando las causas profundas, pero si te vuelvo a topar las comentamos para que en este comentario no parezca que te odio y se desate una revuelta "olímpica", je. Como sea, siempre se agradece la candidez.
Saludos

Profana dijo...

Mi estimada DF, ahora si nomás no concuerdo contigo.

Tampoco creo que la marcha haya servido de algo fuera de miles de pesos para los medios que la organizaron y que la cubrieron.

Entiendo perfecto el descontento social que existe por la evidente inseguridad que hay. Todos hemos conocido al menos alguna historia desgarradora por este motivo. Pero también como sociedad nos debería encabronar que un niño pida dinero en la calle. Sólo que por ellos no hay medios dispuestos a organizar nada.

Cuál es la diferencia de esta marcha a la de los 400 pueblos? que fueron más a esta? Pero los 400 pueblos han sido más constantes y de verdad viven su resistencia en condiciones infrahumanas!!! La diferencia está en la cobertura que los medios han decicido darles. Ambas son tan justas como cualquier otra. Ha existido solución algun entonces? Simplemente no.

Ok, entonces después de la bonita marcha que se organizó, ¿qué sigue? ¿cuál será el siguiente paso? ¿o nomás ahí muere? Eso fue lo que nadie ha dicho... y por tanto, no convierte a la marcha sino en un (otro) intento fugaz para protestar, pero sin ser en realidad una gesta de un verdadero cambio.

slds.

Rafael Merino Isunza dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Rafael Merino Isunza dijo...

D.F. me parece que este post se generó con el sentido y los elementos que estimularon la marcha: un tanto de vísceras a flor de piel y otro tanto de esperanza naif por una manifestación masiva que “responde a una causa social justa”.

Disiento de la idea de los no acarreados y de la buena voluntad de los medios, de hecho justo en el post que acabo publicar verso sobre ello, se llama: “Los medios y el miedo”, ahí entro en más detalle sobre el tema.

El tema aquí es que tu post resulta tan emotivo que pierde el foco de temas importantes y termina siendo, más que reflexivo, colérico.

Saludos y un beso.

Víctor dijo...

Mira, estoy contigo en esto, me duele saber que por no contar con la billetiza del Sr. Martí se haga caso omiso a las más horripilantes muestras de abuso de autoridad, de desmanes criminales, te injusticias burocráticas, y todo lo que adorna nuestra reputación al vivir en este país.
Es tristísimo caray, no se diga injusto, dónde quedó la supuesta igualdad?, la verdad harto estoy de desayunar con mentiras, comer lo mismo y cenar stress, me empacho de poison! (y no de la banda Glam-rock)
Quisiera esa marcha pero encima de tanto pend*jo funcionario que tenemos, algo que de verdad los marque... me he quedado pensando... será que no estoy bien enterado pero según yo... no ha habido casos al menos a la luz pública donde a alguno de estos personajes de "poder" les haya sucedido algo similar dentro de sus familias o sí?... recuerdo el robo de la camioneta de la señora Pemex, madre de Cárdenas Jr., pero no otro...mm.. no sé, neta qué necesitan esos cabr*nes?... qué frustrante.
Saludos.

Emilio M O dijo...

Gracias a toda la gente que marcho ese día hoy puedo salir a la calle sin ningún temor!!!! beeeeeeee!!!!!

O lo que es lo mismo esa y cualquier otro tipo de marcha son intentos esteriles para tratar de cambiar "x" situación.

Como marchar contra la inseguridad si la gente que convoco a la marcha no denuncia los delitos. Para perseguir un delito hay que denunciarlo de otra forma no veo como.

Es como los que se quejan de la situación en mexico pero se jactan al decir "por eso no fui a votar" o peor aun la politica y los politicos les valen madres.

Cuantos de esos cientos de miles que fueron a la marcha crees que piensan que ya cumplieron con su labor al ir a la marcha y ahora todo lo dejan a terceros.

Cuantos estan seguros que su "velita para iluminar a México" sirvio realmente para algo.

Patetico que la TV en México armara un reality de esto al mas asqueroso estilo de Big Brother o la academia. Mas patetico aun que los mexicanos sigamos comprando espejitos 500 años despues de la conquista.

SalU2

Luis Ricardo dijo...

Ay pinches panistas dejen de ver televisa.

Miss B. dijo...

Yo no asistí a la marcha, soy mala ciudadana

TObe dijo...

Chale con las marchas no se arregla nada, al contrario, se hace más desmadre. Mejor sería cambiar uno mismo, para bien y hacer lo que se tenga que hacer, osea: chingarle.

LeM. Alex Vázquez Padilla dijo...

Buen post, sabes ke es lo uniko malo de todo esto...........no creo ke ninguna manifestacion o marcha, cambie el corazon o la forma de pensar de los sinverguenzas ke aterrorizan a la socierdad mexicana, en vez de eso, hay ke encuestar para ver a cuantas personas les robaron o aprovecharon el deskuido de la marcha para sakear sus hogares...

Michel Hernandez Villanueva dijo...

Lo lamento... pero para mi es una llamarada de petate.

Existe una solución REAL: Se llama equidad.

Lástima que los seres humanos somos tan estúpidos como para siquiera contemplar la posibilidad.

Eric Uribares dijo...

Un pequeño matiz, que caba siendo no sólo de forma, si no de fondo:

dices que todos somos culpables, los políticos por carcomidos y corruptos, y la sociedad por dejada y blabla..

bien, nomás mi Defe que se te olvida que la clase política es simplemente el reflejo de una sociedad, los políticos no nacen aparte ni se crían en incubadoras especiales ni toman clases en la primaria para conflagarar contra el mundo.

Efectivamente, el PROBLEMA ES DE TODOS, pero yo creo que los corruptos y carcomidos no son sólo los políticos (que efectivamente lo son) hay que aceptar que VIVIMOS TODOS NOSOTROS, en una sociedad que en general es corrupta y carcomida.

La marcha será inutil y nada tiene que ver con lo político, lo será, porque parte de que NOSOTROS ESTAMOS BIEN (los ciudadanos) LOS POLÍTICOS (los que no pueden, que renuncien) SON LOS MALOS y no, mi estimada Defe, es la sociedad en general la que tiene que asumir el compromiso, y ese va m´pas allá de marchitas,

o qué, a poco todos somos muy honestos?? por qué esperar entonces que los políticos lo sean?


besos barbudos


pd. pa que no te quejes de que anhora mis comentarios son cortitos, jeje

Anónimo dijo...

Ayer en el periodico el centro salió una nota acerca de los chavos de bachillerato, la mitad de ellos piensan que ser homosexual es suficiente motivo para no ser considerado como ser humano; el 12 porciento considera que la mujer solo sirve para tener hijos y cuidarlos; el 25 es víctima de abusos.

Creo que lo que hace falta es educación, ¿cuantos de nosotros tuvieron oportunidad de conocer un instrumento musical, de practicar un deporte? Pero no todo fue culpa de la escuela, ni del gobierno, tambien tuvieron la culpa nuestros padres, nuestros vecinos, nosotros mismos; Socrates creia que la causa del vicio es la ignorancia, ¿porque permanecer ignorantes?

Las quejas ya estan, las respuestas ya estan, sabemos que hay algo mal ¿y ahora que hacemos?

lavega dijo...

Yo creo que la voracidad de pocos es la razon de la calidad de vida en Mexico. Como es posible que el 90% de la riqueza nacional se encuentre repartida entre el 10% de las familias? este es el principal problema, segun veo. La falta de oportunidades, la nula equidad en el reparto de los bienes nacionales, el derroche de la clase politica. De las pocas personas que he deseado la muerte, es de los presidentes, por que cada cabron de esos que sigue consumiendo oxigeno, nos cuesta su salario de presidente completito!!!!, como si no se hubieran inchado de dinero en su respectivo sexenio. Y no hablar de todo el derroche de dinero en los viaticos y sueldos de los diputadas y diputadas. Ahora que estan subiendo la gasolina, porque no le bajan a la "dieta" de la clase politica? Dicen y dicen bien que las ganancias son privadas mientras que los gastos son publicos. No se, creo que no tenemos futuro, ser explotados o explotadores, pero no me gusta ninguno de ellos...

Hannah dijo...

Mi papá esta en la carcel -injustamente- y tampoco nadie hace algo al respecto
Pinche México.

cervantes dijo...

puaj !! dirias tu querida defeña...

PUAJ ! MEJOR CON MAYUSCULAS.

http://edgarclement.blogspot.com/2008/09/y-la-marcha-sigue.html