miércoles, 17 de noviembre de 2010

La existencia de la nada

En la misma tarde vi dos películas de la muestra Internacional: "Somewhere" de Sophia Coppola y "Antichrist" de Lars von Trier. Llegué a la Cineteca poco antes de las 3:30 y apenas alcancé boleto para la segunda. Sabía que el morbo sería el motivo de algunos para verla, tan escandalosa que estuvo en Cannes, tan planeada para jamás proyectarse en semejante país ultra católico, tan espantadas que salían las personas de las salas.

Somewhere, cuarto filme de Sophia Coppola, nos presenta a un hombre que parece haber logrado todo sin mucho esfuerzo detrás, es un actor. La jauría hollywoodense es dueña de un poder incalculable punto y aparte del dinero, posee el don de la perpetua servidumbre del prójimo y todo lo que pudiera implicar: favores gratuitos, amabilidad excesiva, sexo casual a raudales. Es la nobleza de la posmodernidad. Coppola consigue que algunas secuencias que ocurridas en otro ámbito son muy disfrutadas por el género masculino (un par de encantadoras gemelas rubias haciendo table dance), sean tediosas e incluso aburridas. Un topless más, un topless menos… pfff. La repetición como forma de nulificación del asombro. La satisfacción de los deseos como asesinato del entusiasmo. Johnny Marco es un hombre que vive una vida vacía, no está, no es. Y se da cuenta. Se da cuenta que no es nada, que no es nadie, cae al vacío, a la desolación más tremenda de todas, la de no tener porqué vivir. (-¿Haber logrado todo no implica ese castigo?-). No hay una tragedia, no existe una vida de miseria o una historia de fracasos detrás de tal pesadumbre.

En "Antichrist" se explora el dolor más profundo que puede experimentar un ser humano, la muerte de un hijo. Existe un motivo para precipitarse al vacío al contrario de "Somewhere", aquí hay uno clarísimo y punzante. Y lo es más por la manera en la que la tragedia ocurre ya que es durante el coito de los progenitores. La poderosa distracción de un encuentro tórrido y brutalmente sensual. De haber pasado en otras circunstancias la culpa no sería tan lapidaria. Él, psicoanalista, decide tomar en manos propias el caso de su esposa contra lo que toda ética pudiera aconsejar. Es entonces cuando atestiguamos las consecuencias y el dolor casi perceptible de ella (de hecho ambas películas consiguen transmitir cierta cantidad de angustia en algunas secuencias), sus ataques de ansiedad, su autoflagelo. La actitud amena y a la vez distante de un esposo preocupado por representar cabalmente los papeles de médico-paciente y no cruzar la frontera al lado de los amantes. Lenta y fantásticamente va develándose la premisa del filme ¿A qué le tiene miedo la mujer? ¿Por qué su lamento es atípico y extremoso? La primera respuesta resulta simple al principio, fobia a la naturaleza. Tomando en cuenta que a mayor exposición al miedo, superación del mismo, él la lleva al bosque donde tienen una cabaña. La mujer le tiene ese horror a la naturaleza, porque la vida muere, porque la naturaleza en su fuerza creadora necesariamente destruye, porque la muerte existe por el sexo. Porque no importa qué, todo lo vivo debe morir, la muerte es la cuota por coger. Y qué es el ser humano sino parte de la naturaleza, su víctima, su propio hijo. El hombre a imagen y semejanza de madre natura es maravilloso y a la vez terrible. El giro de tuerca de la película es poco común y desolador.

Me llamó la atención la paradoja en ambas, tanto quien tiene todo está vacío, quien lo pierde todo se consume.

Salí del cine con una nebulosa enorme, satisfecha de haber visto dos excelentes películas que me hicieron recordar algo que siempre he defendido y pensado, que la mente y la naturaleza humana son incomprensibles y a veces injustificables "los misteriosos caminos de la psique humana"(sin meterme con los discursos de la psicología) y que no necesita de motivo alguno para hundirse en lo atroz.

PD 1.- Qué grandes son Charlotte Gainsbourg y Willem Dafoe. Pocas veces un actor merece tanto respeto. Son, sin contar al niño que muere en los primeros minutos de la trama, los únicos actores de la película. Cargan todo el peso de semejante mounstruo encima, y pueden con él. La estética fotográfica es suprema, SUPREMA.

PD 2.- Me quedé pensando si acaso la película de Sophia no hace algún tipo de guiño autobiográfico. Johnny Marco tiene una hija de once años que lo visita y se da cuenta de las patanadas del padre. Una hija que llora por el abandono.

4 comentarios:

yorkperry dijo...

Te envidio! Muero por ver somewhere!

Hermes dijo...

He leido varios reviews en varios blogs de la pelicula de Coppola... creo que la vere. Antichrist ya la he visto, y he de decir que el tema es manejado con tal habilidad que comparte la desesperacion y rabia. Buenas recomendaciones las tuyas, gracias ;)

Pura Botana dijo...

Eres muy bonita amiga y además hases muy buenos comentarios sobre películas que sin lugar a dudas son indispensables para el arte internasional, incluyendo a México, claro esta, siempre es bueno saber que existen mujeres como tú que son sencibles e inteligentes, de verdad mucha felicidades por eso.
¿Te gusta la música? Porque acá pasan música muy buena que seguro que a ti te encantaría porque se nota que eres bien sencible. Mira el link:

http://bit.ly/b3HEJG

Ojala te guste yo te voy a seguir leyendo porque escribes muy padre, felicidades!!!!

Kyuuketsuki dijo...

Dafoe es un actor enorme, uno de mis favoritos. Igual puede ser un excelente villano en una película dominguera como Spiderman, que cargar con todo el peso de una películar como Antichrist. Larga vida a Dafoe.